Los atletas utilizan gran variedad de prendas compresivas para incrementar el rendimiento y acelerar la recuperación después de los entrenamientos y la competición.
Existe abundante bibliografía sobre la ropa compresiva pero los resultados obtenidos en los diferentes estudios son bastante dispares.
Repasando algunos de los estudios realizados los beneficios que se pueden atribuir al uso de estas prendas son:
- Reducción de la concentración de lactato durante esfuerzos máximos y mejora en la eliminación del lactato.
Los resultados de los estudios realizados por Chatard et al (2004) y Berry y Mc Murray (1987) indican que las medias compresivas pueden acelerar la eliminación del lactato y mejorar la recuperación durante y después del ejercicio intenso.
Faulkner et al (2013) también observaron una tendencia al incremento de la eliminación del lactato en sangre al utilizar prendas compresivas en las extremidades inferiores.
- Mejora en el salto vertical.
Doan et al. (2003) estudiaron los efectos de los “shorts” compresivos en pruebas de velocidad y salto. Los resultados obtenidos señalaron un incremento en la capacidad de salto vertical con contra movimiento.
Los autores atribuyen estos beneficios a que la compresión mejora el calentamiento de los atletas al aumentar la temperatura de la piel y disminuye la oscilación muscular al contactar contra el suelo.
- Disminución del daño y el dolor muscular “agujetas”.
Diversos estudios constatan que la utilización de prendas compresivas durante y después del ejercicio reducen el dolor muscular posterior al esfuerzo.
Ali et al (2007) determinaron que la utilización de medias compresivas durante un carrera de 10 km reducía el dolor muscular después del ejercicio en atletas aficionados.
Chatard et al (2004) midieron una reducción en la percepción del dolor en las piernas después de un ejercicio intenso con medias compresivas.
Duffield et al (2007) destacaron las cualidades recuperadoras de las prendas compresivas al disminuir la percepción del dolor y el daño muscular post ejercicio.
Valle et al (2014) recomendaron la compresión como método indicado para reducir el dolor muscular en futbolistas.
Hill et al (2014) también observaron que las prendas compresivas mejoraban la recuperación del daño muscular.
Pruscino et al. (2013) sugiere que las prendas compresivas pueden actuar a nivel psicológico. Su estudio recalcó un incremento en la percepción de la recuperación y un descenso en la percepción del dolor muscular usando prendas compresivas después del ejercicio en jugadores de hockey hierba.
- Reducción hinchazón y edema.
Las prendas de compresión disminuyen la retención de líquidos y la hinchazón en las extremidades.
Kraemer et al. (2001) describieron un descenso de la hinchazón en los brazos después de realizar flexiones de codo con maquina isocinética utilizando unas mangas compresivas.
- Mejora de la circulación sanguínea, la oxigenación muscular y el gasto cardiaco.
Menetrier et al (2011) descubrieron un aumento de la saturación de oxigeno en los gemelos gracias a las medias compresivas después de un entrenamiento en tapiz rodante.
La compresión favorece el aporte sanguíneo a los tejidos resultando en una mejora de la oxigenación durante los ejercicios de corta duración, por esta razón Coza et al (2012) recomiendan la utilización de medias compresivas en deportes con cortos intervalos de intensidad.
Maton et al (2006) exponen que la compresión actúa como una fascia inflexible que durante la actividad incrementa la acción de bombeo de los músculos ayudando al retorno venoso y previniendo la acumulación de sangre en las extremidades.
Varela-Sanz, A., et al (2011) relataron un descenso del porcentaje de la frecuencia cardiaca máxima durante un test en cinta rodante a velocidad de competición en deportista entrenados que utilizaban medias compresivas.
- Incremento de la recuperación muscular.
La compresión después de un entrenamiento pliométrico aceleró la recuperación muscular y evitó un descenso del rendimiento en posteriores ejercicios explosivos, como Countermovement Jump o Squat Jumps. Jakeman et al (2010).
Kraemer et al (2010) vieron una mejora en los indicadores de recuperación fisiológica y psicológica si se vestía un traje compresivo durante 24 horas después de un entrenamiento intenso de pesas.
- Incremento de la eficiencia mecánica.
Kemmler (2009) y Ali (2007) encontraron ligeras mejoras en la resistencia en tapiz rodante y menor desgaste muscular después de una carrera de 10 km, respectivamente.
Estas pequeñas mejoras son atribuidas entre otros factores a las medias compresivas que mejorarían la mecánica de carrera de los atletas.
Sperlich et al (2013) cuantificaron una reducción del ángulo de flexión de las rodillas en esquiadores de elite al simular un descenso de esquí en una maquina vibratoria.
Las prendas compresivas también disminuyeron la oscilación de los músculos de los muslos.
Doan et al. (2003) midieron un aumento del ángulo de flexión de cadera en esprints de 60 m utilizando shorts compresivos. Este autor considera que el uso de materiales compresivos puede disminuir el riesgo de lesión. Y cita a Kujala et al (1997) que sostienen que los pantalones compresivos pueden ayudar al trabajo excéntrico de los isquiotibiales durante la fase final del swing de la pierna al correr.
Michael et al (2014) también piensan que la compresión puede beneficiar el tratamiento y la prevención de las lesiones.
En su estudio obtuvieron una mejora del equilibrio sobre una pierna con mallas compresivas.
Los estudios muestran que las prendas compresivas proporcionan diferentes posibilidades en el rendimiento deportivo y en la recuperación post esfuerzo.
Nosotros utilizamos las de la marca catalana Hoko (las fotos de este artículo lo son), que además de una gran eficiencia, tienen un gran gusto por la estética.
HOCKEY PATINES - OK LIGA
Fuente: Ramón Rosanas - All The Right Moves